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Enseñanza del Apocalipsis

NOTA INICIAL: La siguiente Enseñanza explicando el Apocalipsis fue entregada por el Padre antes de 1950 e incluye los párrafos iniciales de la primera Cátedra encontrada en el Tomo I del Libro de la Vida Verdadera.

Desde el principio de los tiempos, Yo, como Padre, inspiré al hombre la práctica del bien. Mas los hombres se apartaban de los mandatos divinos cayendo en idolatría y en actos abominables ante Mí. Vencían los fuertes, caían los débiles y el varón tomaba a la mujer como esclava. Fue necesario entregar a Moisés en el Monte Sinaí los mandamientos de la Ley divina. En esa Ley estaban las normas y preceptos que deberían regir al pueblo de Israel. A esos mandamientos divinos Moisés añadió las ordenanzas y reglas que juzgó necesarias para apartar a Israel de los malos hábitos y pecados adquiridos en el tiempo de su esclavitud en Egipto, y en esas ordenanzas se les decía: El que diere muerte, lleve sobre sí la misma sentencia. El que hurtare, restituya a su hermano. El que hiciere mal, ojo por ojo y diente por diente pagará.

Moisés sabía que los malvados y disolutos de ese Primer Tiempo no hubieran entendido de otra manera la importancia de la obediencia a los mandatos y preceptos divinos.

Llegó el Segundo Tiempo y vine como Cristo en Jesús a morar con vosotros y en mi palabra os dije: «Aquel a quien hirieren en la mejilla derecha, muestre la izquierda. Perdonad a vuestros enemigos y amaos los unos a los otros».

Y en el Tercer Tiempo, en el que os encontráis, he venido a deciros: Si el asesino de vuestro padre perseguido por la justicia humana, llamare a vuestra puerta implorando ayuda, ¿qué haríais? Protegerle. Si así lo hiciereis, demostraréis haber alcanzado la evolución espiritual, que os permite cumplir con la Ley Divina de vuestro Padre Celestial que os manda: Amaos los unos a los otros; resucitad a los espíritus que han muerto a la vida de la gracia, porque todo espíritu será salvo.

Hoy vengo a hablar a vuestro espíritu y a revelaros el contenido de los Siete Sellos, el Libro de vuestra historia, de la Profecía, de la Revelación y la Justicia.

Soy Yo quien ha venido a deciros que hoy vivís en el tiempo perteneciente al Sexto Sello.

El año 1866 marca el principio de este tiempo de luz. Yo envié a Elías para que descorriese el velo del misterio e iniciase el tiempo de mi comunicación como Espíritu Santo entre la Humanidad.

Elías iluminó a un varón destinado por Mí para que fuese el precursor. Aquel escogido, llamado Roque Rojas, fue quien escuchó de Espíritu a espíritu la voz del Profeta que le ordenaba en mi nombre llamar y reunir a sus hermanos, porque una revelación divina estaba a punto de iluminar los destinos de la Humanidad. Roque Rojas, manso y humilde como un cordero, obedeció la voz espiritual, respondiendo: «Hágase en mí la voluntad de mi Señor».

Roque Rojas reunió a un grupo de hombres y mujeres de fe y buena voluntad, y allí, en el seno de sus primeras reuniones, Elías se manifestó a través del entendimiento del Enviado, diciendo: -Yo soy Elías el Profeta, el de la transfiguración en el Monte Tabor-, y dio las primeras instrucciones a los primeros discípulos, al mismo tiempo que les anunciaba la Era de la Espiritualidad y les profetizaba que pronto llegaría el Rayo del Divino Maestro a comunicarse con Su pueblo.

Un día en que el humilde recinto de Roque Rojas se encontraba pletórico de adeptos que confiaban en la palabra de aquel varón, descendió Elías a iluminar la mente de su portavoz, e inspirado por Mí, ungió a siete de aquellos creyentes a quienes les dio la representación o el simbolismo de los Siete Sellos.

Más tarde, cuando llegó el instante prometido de mi comunicación, encontré que de aquellos siete escogidos, sólo uno velaba en espera de la llegada del Casto Esposo y ese corazón era el de Damiana Oviedo, la doncella cuyo entendimiento fue el primero en recibir la luz del Rayo divino como premio a su perseverancia y a su preparación.

Damiana Oviedo representaba el Sexto Sello. Fue una prueba más de que la luz del Sexto Sello es la que ilumina esta Era.

En el Segundo Tiempo encontré regazo de mujer, regazo materno, y en este tiempo también descansé en el corazón limpio y puro de Damiana Oviedo. Su regazo de doncella fue maternal para el pueblo de Israel, y por su conducto preparé a los guías, a los portavoces y a los labriegos. La dejé llegar a los umbrales de la ancianidad y le dije: «Vos, que os habéis levantado como fuente de amor y habéis dejado encendida en los corazones una antorcha de fe, descansad». Ella me pidió venir en espíritu a trabajar porque fue celosa de mi Ley, y no quiso que ésta fuese mancillada, y Yo se lo concedí.

Lo que en los tiempos pasados conocisteis solamente a través de símbolos, hoy lo conoceréis profundamente con la claridad del dia.
Yo os hablé como Maestro en sentido figurado; tomé para mis parábolas las cosas familiares, las cosas que diariamente vuestros ojos contemplan, pues como todas las cosas llevan en sí esencia y significan cosas espirituales, me era fácil tomarlas para hablaros de lo eterno.

Tomando las cosas pasajeras os hablaba de lo que nunca muere; tomando como ejemplo lo material os hablaba de las cosas del espíritu.

Si en un principio no fui bien comprendido, si solamente algunos de los que muy cerca de Mí se encontraban podían interpretar mis palabras y mis enseñanzas, después la Humanidad, cuando despertó para mi enseñanza, cuando abrazó mi Doctrina, llena de fe supo leer, supo comprender y sentir las enseñanzas de Cristo a través de Jesús.

Pero algunas cosas se encontraban veladas por un misterio, siendo que Yo no soy un secreto para nadie; el secreto y el misterio son hijos de vuestra ignorancia. Ni los mismos teólogos, ni los grandes filósofos acertaban a penetrar hasta la profunda verdad de aquellas cosas, mas los tiempos pasaron, y es llegado para vosotros el tiempo del esclarecimiento, el tiempo en que los velos se descorren y los misterios se aclaran, en que el sentido figurado se torna en real y comprensible.

De cierto os digo que muchas cosas que dije a través de mis profetas y de mis apóstoles, ni ellos mismos conocieron su sentido, porque no era su boca la que hablaba sino el Verbo divino.

Los profetas vieron tronos semejantes a los de los reyes de la Tierra, libros, seres con forma humana; palacios con cortinajes, candelabros, el cordero y muchas figuras más. Pero ahora debéis comprender que todo ello sólo encerraba un significado, un símbolo, un sentido figurado de lo divino, una revelación que tuvo que ser expresada a vosotros bajo una forma alegórica, ya que no os encontrabais capacitados para comprender otra más elevada.

Todo cuanto os enseño en este tiempo y cuanto acontece en el mundo, es la explicación y el cumplimiento de la revelación que por conducto de mi apóstol Juan hice a la Humanidad, cuando habitando mi discípulo en la Isla de Patmos le llevé en espíritu a las alturas, al plano divino, a lo insondable, para mostrarle por medio de símbolos el principio y el final, el Alfa y la Omega, y vio los acontecimientos que fueron, los que eran y los que habrían de ser.

Para que Juan pudiese revelar la existencia de tales cosas a los hombres, fue menester que el Padre hiciese el llamado al espíritu del profeta hacia el Más Allá para manifestar delante de aquellos ojos atónitos, absortos, el contenido del libro misterioso, del Gran Libro de la Vida.

Fue necesario también que el Padre limitase las profundas cosas espirituales, las grandes cosas de la Divinidad en figura simbólicas, en figuras alegóricas de gran contenido, de profunda significación, para que el profeta, volviendo de su éxtasis a la Tierra, escribiese y diese testimonio a los hombres de lo que había visto y oído en el Más Allá, y Juan, como discípulo obediente, así lo hizo y así testificó entre la Humanidad.

Nada comprendió por el momento, mas mi voz le dijo: «Lo que vieres y oyeres, escríbelo» y él escribió, y su testimonio no ha sido interpretado bien por los hombres: la esencia de su contenido no ha sido encontrada todavía por la Humanidad, y en verdad el Padre os dice: Los hombres no han descubierto el significado de aquella profecía y, sin embargo, su sentido real lo están viviendo día a día.

Aquella revelación que le confié a Juan, mi apóstol, vidente del Segundo Tiempo, no le habéis dado toda la importancia que tiene. La Humanidad ha posado sus ojos sobre aquel testimonio y de él nada ha entendido.

Cierto es que la Humanidad conoce aquella profecía mas no la siente en su espíritu. Hay quienes solamente aciertan a sentir temor sin alcanzar a comprender todo el contenido de la gran revelación concedida por Dios al profeta, y aquella gran revelación es una gracia que el Padre quiso que los hijos alcanzaran por el infinito amor que les tiene, para que las cosas que eran solamente del conocimiento de Dios, pasaran a ser también del conocimiento de los hombres.

Por eso, a través de aquel profeta os revelé la existencia del Libro de los Siete Sellos, libro que no fue desatado en esta nación mexicana como muchos de vosotros creéis, porque ese libro no pertenece a una nación ni a determinado número de escogidos, ni está sujeto a un tiempo. Es la misma eternidad, es el destino de todos los espíritus encarnados en humanos, es la historia, el trayecto del espíritu del hombre de principio a fin, con su lucha, sus goces, sus pruebas y sufrimientos, sus aciertos y sus yerros, su pecado y su arrepentimiento, su tiniebla y su luz y su redención final.

Vuestro espíritu ha escrito su historia y su jornada en ese libro de los Siete Sellos, ahí están anotados por Mí todos vuestros actos, cada uno de vuestros pasos, pensamientos y palabras. Los grandes hechos de vuestro espíritu, las grandes vicisitudes y jornadas, sus grandes pruebas, sus cálices de amargura, todo está escrito ahí en verdad.

Mucho ha vivido vuestro espíritu, pero vuestra carne no lo sabe. Si vuestra materia ha olvidado los primeros pasos de vuestra infancia, ¿cómo ha de conocer la evolución de vuestro espíritu a través de su larga jornada? ¡Cuán poco ha podido revelar el espíritu a su materia! y no os lo he concedido por vuestra falta de evolución.

Hoy de lleno el hombre está viviendo la profecía de aquella revelación que vosotros conocéis por Apocalipsis o Revelación de Juan; en verdad, tiempos vendrán en que la Humanidad, interesada en las grandes revelaciones, analice, comprenda y sienta en verdad todo cuanto Yo allí os revelo, os descubro y os digo.

Por eso Juan contempló, a similitud de Daniel mi profeta en Babilonia, a un hombre con aspecto de anciano sentado en un trono, que no era otra cosa que vuestro propio Señor y Su poder, lo cual fue una alegoría porque Dios no es un anciano porque está fuera del tiempo, ni tiene forma de hombre, ni está en un trono como los reyes de la Tierra.

Juan contempló enfrente de Él siete espíritus, y no os confundáis si os digo que significaban siete esencias inmanentes de Dios, porque Dios es el Increado, la fuente suprema e infinita de virtudes y atributos; toda virtud, toda potencia y atributo del Señor es vida y es espíritu y con esas potencias, atributos o virtudes le he dado vida a todo. De ello todo lo he infundido y saturado de mi propia vida, y llenos de mi propio Espíritu el Universo y toda la Creación están.

Y esos siete espíritus son siete de las grandes virtudes con que he revestido y engalanado a todos los espíritus, para que en el trayecto de su vida se comportasen como seres semejantes al que les creó.

Mi profeta vio también siete lámparas con la flama que alumbra en verdad los Siete Sellos del gran Libro, porque son también la alegoría de esos mismos siete espíritus simbólicos de Dios, las siete virtudes que han iluminado la senda de todos los espíritus al través del tiempo.

Juan, en su retiro solitario penetró espiritualmente en el Más Allá, y al contemplar los grandes misterios del Señor encerrados en símbolos, allí contempló también la figura de María.

En esa gran revelación confiada por el Padre a Juan para los hombres de las eras venideras, él, después de una gran señal, contempló a una mujer vestida de sol y la luna debajo de sus pies, y una corona formada sobre su sien por doce estrellas.

Aquella mujer sentía dolores de parto y cuando aquel dolor era más intenso, vio Juan a la maldad en forma de dragón acechándola, esperando solamente el nacimiento del hijo para devorarlo.

Y el Maestro os dice: Si esa revelación, dada por el Padre a Juan, hablaba de los tiempos venideros, Yo os digo: Mi profeta vio a María en el Tercer Tiempo, próxima a dar a luz al pueblo mariano y a la maldad acechando al pueblo del Señor.

Juan contempló también que en el instante del nacimiento, se entablaba una gran batalla de ángeles contra el dragón, el que simbolizaba la fuerza del mal, una batalla que es la que ahora tenéis, porque el pueblo mariano ha nacido, ya ha surgido sobre el haz de la Tierra y hoy se encuentra recibiendo su escudo y su espada de amor para penetrar en la gran batalla final, mas es necesario que veáis que el enemigo más poderoso lo lleváis en vosotros mismos. Cuando lo hayáis vencido, triunfando sobre la fuerza de la maldad que os inspira el egoísmo, veréis bajo vuestros pies al dragón de siete cabezas del que os habló Juan. Eso significa esta revelación, ¡oh pueblo amado!

Y el profeta contempló además, en verdad os digo, que después de ser atada y arrojada al fuego la fuerza del mal, surgía el espíritu de tentación en forma de bestia y el Padre os dice: ¿Cuál es la morada de la bestia? Es el abismo de donde surge para apartar de mi senda a mis hijos, para empañar las virtudes que son las luces con que Yo he iluminado a vuestro propio espíritu y atraerlo hacia él y retardar vuestra llegada; pero ese abismo, os digo, no está en la Tierra ni está en el Más Allá: ese abismo está en el corazón de los hombres; allí ha encontrado su propio abismo la bestia del mal, allí ha encontrado su antro; desde lo profundo del corazón de los hombres surge, se manifesta para hacer que los unos se devoren a los otros, para despertar sed de sangre y de odio entre los hermanos, para hacer que pueblos devoren pueblos. Es, como el dragón de maldad que le dio origen, bestia insaciable de vidas, de sangre, de paz, de armonía, de fraternidad y de espíritualidad y es quien ha inspirado a los hombres siete armas que se oponen a las siete virtudes, siete pecados que son los que han hecho caer a los hombres en los profundos abismos de la degeneración.

Comprended entonces que el dragón de la revelación simboliza la fuerza del mal colectivo, creado por el mal de siglos y siglos de faltas y desobediencias a la Ley divina de todas las generaciones humanas.

La bestia de la parábola simboliza el mal individual, ese egoísmo que se esconde en el corazón de cada ser humano. Y el poder de ambos, del dragón y la bestia, esas fuerzas del mal que invisibles flotan sobre la Humanidad, será vencido cuando os améis los unos a los otros.

Desde el principio de los tiempos de la Humanidad así ha sido hasta vuestros días, pero mi presencia nunca le ha faltado a ningún espíritu; la luz de Mi espada le ha iluminado y le ha libertado. Nunca he permitido que el último átomo de conciencia se pierda en ninguna criatura, para que por ese átomo pugne por su salvación, y en este tiempo de pasiones desencadenadas, de perversidad, de materialidad, de lujuria, de egoísmo y desenfreno de todos los pecados, la bestia, en verdad os digo, se ha enseñoreado y ha hecho trono en el corazón de los hombres.

La ciudad de Sodoma y la ciudad de Gomorra, las primeras grandes ciudades pecadoras entre la Humanidad, hoy resurgen, hoy las contemplan mis ojos justicieros nuevamente asentadas entre los hombres y su civilización materialista, y contemplo a todos los placeres y a todos los vicios rindiéndoles culto como solo puede rendírsele culto a un dios. Sí, el fuego, en verdad, fue el que exterminó a aquellas ciudades paganas y pecadoras. Ahora será nuevamente el fuego, mas ese fuego lo encenderá la propia mano del hombre, guiada por mi justicia perfecta. De estas nuevas Sodoma y Gomorra no quedará ni ceniza, os dice el Maestro, no quedarán vestigios.

Yo estoy penetrando por medio de los espíritus enviados por Mí entre los hombres, portadores de mis virtudes y mi protestad, de mi luz, hasta lo más profundo de las consciencias para que la Humanidad despierte.

Los unos, los seguidores de mi Doctrina, despertarán antes de la gran batalla y lucharán en su propio interior contra sí mismos, expulsando de su propio corazón a la bestia que duerme, la que se ha enseñoreado porque ya no necesita estar despierta para gobernar a los hombres, porque éstos son sus súbditos; pero ahí el espíritu humano de mis discípulos despertará para expulsarle, para levantarse y entonces decir: «¿En dónde están mis armas, en dónde mis potencias y virtudes con las cuales poder regenerarme, volver al camino y restituirme a la vida de la gracia?»

Y entonces, la conciencia iluminada por el Espíritu Divino le dirá a aquel que ha despertado: «Las armas están en tu mano, las virtudes están contigo, porque tu propio espíritu es virtud de Dios, es milagro, es parte de Él mismo.»

Vendrá la grande lucha contra el pecado, porque el fuego que ha de envolver en este tiempo a Sodoma y Gomorra, exterminándolo todo, una sola cosa dejará latente: La conciencia en el hombre; esa no podrá perecer, no morirá, y por esa conciencia los espíritus se levantarán, los espíritus despertarán a la verdad y comprenderán mi justicia.

Es menester que ese cáliz de amargura sea bebido hasta las heces, porque así se lo ha preparado para sí mismo el hombre al debilitar, al doblegarse delante de la tentación, al ceder su fuerza y su puesto a aquella otra fuerza maligna que le ha envenenado, a aquella que le ha seducido y engañado.

¿Por qué ha permitido todo eso el Padre? Para que vuestro espíritu tuviese desarrollo, tuviese evolución y me comprendiese por sí mismo, para que nunca pudiera reclamar al Padre la falta del libre albedrío, para que nunca se sintiera como un ser sujeto siempre a Su voluntad superior, incapaz de moverse por sí mismo, de pensar libremente, de moverse por sí solo o de crear.

Largo ha sido el tiempo de la caída del hombre, largo ha sido el tiempo enmedio de la eternidad, de las tinieblas que han envuelto a muchos espíritus. Mas ¿qué significa este que os parece largo tiempo comparado con la eternidad que no termina jamás?

Cuando este tiempo de luchas, de pasiones, de pecado, de incomprensión, de desobediencia y alejamiento del espíritu de las leyes divinas haya pasado, cuando distante quede, entonces todos elevaréis vuestra mirada al Padre dándole gracias por el don bendito de la libertad verdadera que el Padre os confió y que, si por un momento, por el mismo albedrío, llegasteis a ofender al Padre y hacer cosas ilícitas, por ese mismo libre albedrío pudisteis comprender y arrepentiros de vuestras faltas, regeneraros y hacer grandes obras meritorias para agradar al Padre y retornar al fin hacia Él, con el espíritu limpio y acrisolado por la virtud.

Mas si aquel vidente del Segundo Tiempo vio vuestras luchas, vuestras caídas, vuestras tribulaciones, vuestras ofensas, si él contempló en sentido figurado vuestras guerras, las grandes señales del espacio, las caídas de las grandes religiones, también él contempló el triunfo del bien, de las virtudes, el triunfo de Dios y de todos los espíritus.

Sabed que Juan testificó de los ancianos que en espíritu rodeaban al Padre y ¿quiénes son y qué representan esos ancianos? Son grandes espíritus, son siervos del Señor, son aquellos por quienes el Padre, desde el principio de los tiempos, lo gobierna, lo rige y lo mueve todo.

Si vosotros por las noches eleváis vuestra mirada cuando el cielo está limpio, descubrís en el firmamento millares y millares de astros que sumisamente, ordenadamente, ocupan su lugar. Si os profundizáis verdaderamente en esa ciencia, descubriréis que todos y cada uno de esos astros giran en torno de uno superior, de uno que lo rige todo con su fuerza, con su atracción, con su calor y su vida, y comprenderéis que después de ése hay, a su vez, unos más grandes y otros más pequeños pero todos tienen vida y todos tienen luz, y unos dan vida y dan orden a otros, porque en la creación divina no existe el vacío, y así como es en el orden material es también en el orden espíritual.

Las grandes legiones blancas de aquella profecía de Juan son los ejércitos de espíritus diseminados en todos los orbes para llevar a cabo las obras y mandatos del Señor. Unos son instrumentos de mi amor, otros son instrumentos de mi justicia, otros son mis siervos por quienes pruebo a los hombres; todos ellos son siervos celosos y obedientes a mi causa.

La Segunda Jerusalén que Juan contemplara simbolizada por la blanca ciudad, es en verdad, el Padre os dice, la redención del pueblo escogido del Señor, este pueblo que estoy reuniendo, este pueblo que estoy puliendo, que estoy regenerando con mi palabra a través del entendimiento humano en el Tercer Tiempo,

Este mi pueblo, el verdadero Israel, a pesar de su letargo me esperaba y esperaba, porque en su espíritu conservaba la impresión, el recuerdo de mi promesa, no porque existiesen en el mundo hombres que os estuviesen despertando de tiempo en tiempo, porque aquella profecía, en vez de ser puesta delante de los ojos de la Humanidad día tras día para que los hombres no cayesen en el profundo sueño, fue ocultada en el confin de la tierra, fue apartada del corazón del hombre y solamente vuestra intuición fue, Israel, la que os hizo esperar por su cumplimiento.

Este jirón de tierra, esta nación mexicana, tiene grande misión espíritual que cumplir entre la Humanidad, mas no por lo que ella es en sí, sino por lo que alberga en sus moradores, en quienes he depositado espíritus de luz que forman parte de aquella legión de los 144,000 marcados, porque en su seno habitan espíritus de Israel, del pueblo espiritul que en tres tiempos me ha sabido recibir y sentir y que ahora, en este Tercer Tiempo, sabrá levantarse para reconocer a sus hermanos, para borrar fronteras con su amor, para no mirar linajes ni castas, porque sus ojos mirarán con el amor universal con que Yo os estoy amando y os estoy doctrinando.

Sus doce puertas no serán puertas materiales como las de la primera Jerusalén; serán las puertas del mismo espíritu israelita, serán las puertas de las doce tribus que ahora me encuentro congregando para la redención de la Humanidad: esas puertas son las que Yo abro y son puertas de amor, puertas de paz.

La hospitalidad de vosotros, Israel, será espiritual y también material, y la buena voluntad de mi pueblo hará que la naturaleza sea pródiga y responda con abundancia y con bendiciones; y por un momento los hombres de los distintos pueblos de la Tierra, proscritos los unos de sus pueblos, los otros menesterosos, huérfanos muchos, otros sin esperanza ya, escucharán el nombre de este suelo como se escucha algo de fantasía; escucharán este nombre y la existencia de sus moradores como algo inalcanzable, y se levantarán con paso vacilante, pero con el corazón y el espíritu llenos de firmeza y de confianza en pos de los discípulos del Espiritu Santo, como cuando vosotros salisteis de Egipto en aquel Primer Tiempo, llenos de esperanza en la Tierra de Promisión.
Así muchos se levantarán, pero cuando el Maestro os dice: Si váis a estar preparados vosotros como moradores, ¿cúando váis a hacer que vuestra morada se encuentre engalanada y dispuesta para ese gran destino que Yo os he confiado?

¿Cuándo váis a hacer vosotros que vuestras puertas de paz y de amor se abran plenamente, sin que vuestro corazón juzgue ni distinga entre nacionalidades, ni doctrinas, ni religiones, ni clases o razas? ¿Cúando vosotros váis a aprender a compartir de vuestro pan, de vuestros dones, de vuestra luz?

Y os digo aún más: ¿Quién de vosotros conoce su hora? ¿Quién de vosotros sabe el momento en que le he de llamar? ¿Existe acaso determinada edad o determinado momento conocido por el hombre para que la muerte de él llegue? No existen edades para ello, lo mismo puede ser un instante que otro.

Por eso, vivid en paz con Dios y con el mundo, vivid en paz con vuestra carne y con vuestro espíritu. Tened siempre ordenadas todas vuestras cosas, para que cuando Yo os llame no dejéis nada pendiente en este mundo, no llevéis arrepentimiento ni llevéis congojas hacia el Más Allá. Que vuestra partida sea plácida, que vuestros ultimos instantes sean una bendición para los vuestros y una entrega espiritual hacia vuestro Padre.

Mas no porque os aconseje esto quiero que vayáis por la vida llevando la idea de la muerte. ¡Vivid la vida, vividla intensamente, no fríamente! ¡Sabed vivir sus goces y entregaos también a vuestros deberes, cumplid con vuestras obligaciones! Vivid en armonía con vuestras fuerzas materiales y espirituales, haced que exista el balance y el equilibrio en vuestra vida. ¡Amaos los unos a los otros!

Os dice el Maestro: Dad al César lo que es del César cumpliendo con vuestros gobernantes, respetando a vuestros mayores, honrando a vuestros padres, dando buen ejemplo a vuestros hijos y amándose los hermanos por la sangre y hermanos por el espíritu, respetando y amando a los demás pueblos de la Tierra, impartiendo la caridad en lo material y en lo espiritual, ayudándoos y siendo báculo de los unos para los otros en las distintas vicisitudes y dificultades de vuestra vida terrestre, multiplicando vuestra especie, pero multiplicándola también en amor, en buenos hábitos y en buen cumplimiento de todos vuestros deberes.

Habéis descubierto que no hay mejor bálsamo que el del arrepentimiento. ¿Qué es lo que ese bálsamo cura? El dolor, la enfermedad.
¿Qué origina la enfermedad? La falta de cumplimiento de las leyes. La falta de cumplimiento quiere decir desobediencia, y la consecuencia lógica de esa desobediencia es el dolor, pero entonces viene el arrepentimiento que lava la desobediencia, que impide nuevamente faltar y entonces la regeneración por el arrepentimiento trae consigo de nuevo la salud.

Sed médicos de vosotros mismos y de los demás, y estas cosas espirituales enseñadlas a todos, porque vosotros no sois más que nadie; todos tenéis los mismos dones, todos podéis escalar por la misma escala de perfección hacia Mí.

¡Velad y orad, pueblo! Abrid vuestros ojos para que plenamente os deis cuenta del tiempo y del sitio en que moráis. Mirad que sois también moradores de la Sodoma y la Gomorra, de esas ciudades pecadoras que han invadido a todo el orbe; pero en medio de tanto pecado y de tanta prostitución, elevad vuestro espíritu sobre tanta miseria, y perdonaos los unos a los otros.

No dejéis que el pecado os contamine, luchad contra él incesantemente.

Sed vosotros, si queréis, de los primeros que expulséis o rechacéis a la bestia que ha invadido al corazón de toda la Humanidad, de esa bestia del mal, devoradora de hombres, de paz, de virtudes y de bien. Rechazadla, dadle fin, en verdad, os dice el Padre, para que así vuestra simiente vaya penetrando de corazón en corazón, para que este pueblo se vaya multiplicando en la paz y en el bien y después, como ejemplo, se levante entre los demás pueblos de la Tierra para que se levanten a la regeneración, a la paz y a la restauración y ellos, descubriendo que poseen armas con qué luchar, con qué combatir y derrotar a la bestia, se levanten contra ella y la venzan al fin, como contemplara el profeta en la videncia, que la bestia era simbólicamente primero atada y era muerta y arrojada en su propio abismo, en espíritu y en verdad.

Y entonces escucharéis el himno universal, el himno del amor y de la armonía, el himno que recreó el espíritu, el corazón y el oído de aquel buen profeta, de Juan, mi apósotol del Segundo Tiempo.

Cuando estéis vosotros cantando y oyendo ese gran himno, todos vosotros formaréis parte de las grandes legiones de espíritus limpios como el ampo de la nieve, seréis los moradores de la verdadera Jerusalén, símbolo de aquella ciudad que vio morir al Maestro en cuanto hombre, pero que después, por su virtud, por su regeneración le atrajo a sí misma, para que ese Maestro viniese a vivir en el corazón de Sus hijos por toda una eternidad.

Si pensáis que os he hablado de cosas extrañas, de cosas grandes, de cosas incomprensibles para vosotros, Yo os digo: Yo no soy un ser extraño, y si así erróneamente he sido visto por la Humanidad, quiero dejar de serlo para el hombre. Lo divino y lo espiritual no son cosas extrañas para el hombre, puesto que el hombre alberga un espíritu que ha sido antes morador del Más Allá.

Quiero que las cosas divinas y espirituales dejen también de ser cosas extrañas para los hombres, no para que os familiarecéis con ellas, no para que las profanéis ni la toméis como cosas triviales, sino para que las miréis con naturalidad, como cosas que existen, que han sido siempre y que os esperan para convivir con ellas en la vida eterna.

La Búsqueda de la Bestia Apocalíptica Parte 2

Este artículo pertenece al tema de La Búsqueda de la Bestia Apocalíptica. Parte 2 de 2

¿Un Ego Saludable?

No existe tal cosa… Tu ego es esa personalidad, esa máscara que has llegado a creer es el «tú» verdadero.

Y lo peor: Estás en realidad entrelazado con esa cosa, con esa falsa noción de quién tú verdaderamente eres.

Y por supuesto, quien tú eres en verdad es el espíritu dentro de tu cuerpo humano.

Y hay gran cantidad de diferentes apariencias que el ego usa con el fin de engañarnos: La falsa modestia y la timidez no son otra cosa que el ego mismo, solo que funcionando en reversa, porque ¿sabes? la timidez así como la vergüenza -ninguna de las dos es de origen divino-, provienen de la preocupación por lo que los demás puedan pensar de «tí».

Dicho de otro modo: Cuando te mortifica la proyección de la imagen de tu «yo» o de la percepción que otros pudiera tener acerca de esa imagen creada por el ego para esconderse, en realidad lo que haces es reflejar la angustia de ese ego de encontrar la manera más eficaz de engañar a todos… incluyéndote a tí mismo.

Pero la buena noticia es que, aun cuando el ego crea tener total control sobre de tí, el hecho es que tú -el espíritu- eres el que tiene el poder verdadero.

Cualquiera de nosotros puede extinguir su ego completamente, tal y como Jesús nos enseñara a hacer. Cuando menos, podrías comenzar por disminuirlo ahorita mismo.

Todo lo que tienes que hacer es velar y estar consciente de que la bestia está lista y al acecho para escapar de su jaula apenas bajes la guardia.

Esa Voz en tu Cerebro: ¿La Conciencia o el Ego?

¡Cuidado! Lo que muchos creen que es la voz de la conciencia es, en realidad, la voz del impostor: el ego.

Si estás creyendo que tú posees una conciencia propia ¡has sido engañado!

La auto-percepción o consciencia (así, con ese y ce) es una cosa, y la más de las veces es estrictamente personal, y como humanos, tendemos a creer que es nuestra nada más; pero la Conciencia es algo diferente.

Dado que el ego usa otro poderoso truco que consiste en convertir cualquier pensamiento tuyo instantáneamente en una creencia, la defensa de esa creencia se vuelve para tí en la tarea más importante.

No importa si ese pensamiento/creencia es bueno o malo, falso o verdadero, certero o erróneo… Lo único que importa es que sea «tuyo», así que automáticamente e irreflexivamente lo defiendes.

Pero la Conciencia es un asunto muy diferente.

Para comenzar, todos compartimos una Conciencia común, omnipresente, universal, no una que es particular y local, atada a tiempo y circunstancia y por tanto limitada.

Esa Conciencia que es en su naturaleza generosa, altruista, sabia y perfecta, nos enlaza a todos. Por ello, no hay manera en que tengas una conciencia peculiar, distinta a la de los demás.

Así que por un lado tienes una voz que viene del ego y otra, que proviene de la Conciencia.

¿Cómo distinguir la una de la otra? Fácil. La Conciencia siempre habla de la Ley divina… sin cortapisas, sin palabras vanas ni falsos oropeles.

No hay modo de entablar negociación alguna con la Conciencia Verdadera. Es implacable, inmutable, ineroxable… es perfecta ¿recuerdas? y por lo mismo, no la puedes acomodar a tu agenda o intereses personales.

¿Y la otra voz, la voz del ego? Bueno, ésta comienza por arrojar a la mesa todo tipo de ideas, pensamientos, esquemas y estratagemas egoístas, interpretando y acomodando la cosas para que se amolden convenientemente al falso sistema de creencias que tu ego ha desarrollado, negociando hasta conseguir sus egoístas fines, cambiando el sentido de todo sin importar el costo ni detenerse ante nada.

Así que la próxima vez que choques con el sistema de creencias o intereses de alguien más, y esa persona insiste en que está escuchando y obedeciendo la voz en su interior que contradice y se opone a la voz de la Conciencia en tí, asegúrate de que no estés atrapado en una batalla de egos: el de esa persona y el tuyo.

La Receta Anti-Ego


1. Al terminar el día, antes de dormir, repasa todos los eventos y sucesos que has vivido y revisa todas las decisiones que hayas tomado en ese día, sean pequeñas o grandes, aceptando y reconociendo tanto las buenas como las malas, pero enfocándote mayormente en aquellas donde tu ego haya interferido con tu buena naturaleza.

Perdona de todo corazón cualquier ofensa recibida, y entonces pide perdón por las ofensas que tu hayas hecho, y pon todos los eventos del día en su justa proporción, extrayendo de ellos todas las lecciones que te sea posible.

2. Toma la firme determinación de corregir las malas decisiones que hayas hecho, para que la próxima vez puedas hacerlas mejor. Perdónate y acéptate tal como eres, recordando que el perfeccionamiento es un proceso, no un lugar.

3 Tan pronto como abras los ojos al día siguiente, revisa tu determinación de la noche anterior y planea tu día de acuerdo con esa determinación, proponiéndote a tí mismo cumplirla con tu mejor esfuerzo.

4 Ora a Dios en petición de ayuda y guía… no sólo para tí sino para el universo entero. Y no olvides de sentir y expresar tu gratitud a nuestro Padre Celestial por todo, aún por aquellas cosas que aparentemente no te han sido buenas o convenientes… y sonríe. Recuerda: Todo encierra una lección, sea ésta dulce o amarga.

5 Manténte en vela todo el día.

Has esto por al menos 21 días seguidos, para que desarrolles el hábito de ser un «tú» bueno, amoroso y no egoísta.

Después, continúa tratando de ser esa amorosa, espléndida criatura por el resto de tu vida, tanto humana como espiritual… día tras día, uno a la vez


Resumiendo la receta:

«Vencéos a vosotros mismos y
el camino os será fácil; entonces podréis vencer a la bestia que Juan mi apóstol contempló en su revelación.»

El Tercer Testamento

De este modo, no permitirás que tu mente te siga jugando malas pasadas… por cuenta del ego.

La Reencarnación y la Ciencia Humana

La mayoría de las religiones occidentales -especialmente las judeocristianas- rechazan el concepto de la reencarnación del espíritu e incluso algunas lo consideran como herejía, aun cuando no existen un solo testimonio bíblico que refute o niegue la reencarnación.

De cualquier manera, algunos teólogos de esas religiones insisten en que un párrafo de la Epístola a los Hebreos «prueba» de que no existe la reencarnación debido a que simplemente dicho, el hombre puede morir una sola vez (ver nota acerca de Hebreos 9:27) y también ¿Se equivocó Pablo?.

Pero más allá de cualquier debate teológico, existe una enorme cantidad de testimonios acerca de la reencarnación que han estado brotando en todas partes del mundo, y su número crece cada día. Y estos hechos, no pudieron permanecer ignorados por más tiempo por la ciencia humana, ni tampoco pueden ser descartados tan fácilmente.

Los estudios de vidas pasadas.

El Dr. Ian Stevenson de la Escuela de Medicina de la Universidad ha investigado más de 2,600 casos de niños que tienen recuerdos de vidas anteriores.

Cuando menos 900 de estos casos han sido verificados, lo que significa que el Dr. Stevenson posee suficiente información proveniente de los niños objeto de sus investigacionescomo para identificar la personalidad en una vida anterior que ellos recuerdan como suyas.

Los métodos y técnicas indagatorias que el Dr. Stevenson ha seguido por muchos años le han ganado un merecido respeto dentro de la comunidad científica, siempre escéptica en estos asuntos como todos bien sabemos, y los pocos intentos por parte de los fanáticos religiosos para echar por tierra y minimizar sus hallazgos han sido refutados como equivocados y carentes de toda base válida.

Y no es sorpresa el ver que la defensa en contra de tales ataques ha sido erigida no por el mismo Dr. Stevenson sino por sus colegas.

Las Vidas Pasadas de los Niños: Un Argumento muy sólido.

Una de las bases más sólidas de la investigación del Dr. Stevenson respecto a la reencarnación lo constituye el hecho de que los sujetos de sus investigaciones son niños pequeños. ¿Por qué? Por que la probabilidad de que no sean presa tan probable de prejuicios o predisposiciones como los adultos resultan ser.

Y los casos estudiados por el Dr. Stevenson poseen otro poderoso elemento: Están localizados en lo que conocemos como naciones subdesarrolladas y muchos de los niños sujetos de esta investigación viven en pequeñas, remotas y miserables poblaciones, muy lejos de cualquier influencia de los medios masivos de información.


Puedes visitar la página Web del Dr. Stevenson’s
(en inglés) en Children’s Past Lives
.

María: Una Mujer Vestida de Sol

«Apareció
en el cielo una gran señal: Una mujer vestida de sol, con la luna
debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas.
Apocalipsis 12:1

¿Quién es María?

Dios es amor. Esta verdad tan sencilla, reafirmada por Juan en su Epístola
primera (1 Juan 4:8), debe ser comprendida en su magnitud
por todos aquéllos que estudian y analizan las Escrituras.

En Dios encontramos el amor del Padre, ciertamente. Pero ¿y el amor de
la Madre? ¿Es también parte del amor divino o no?

Conviene leer con atención la siguiente metáfora:

¿Se olvidará la mujer de lo
que dió a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre?
Aunque olvide ella, Yo nunca me olvidaré de tí,»
(Isaías
49:15)

En la belleza de esa analogía, descubrimos el insondable, total y
perfecto amor de Dios por Sus hijos. María, a los pies de la cruz
del Maestro, simboliza a todas las madres del Universo; es por ello que
Jesús le dice: «Madre, he ahí a tu hijo.» (Juan
19:26)
En los Hechos de los Apóstoles se lee que éstos
vivían, después de la Crucifixión y resurrección
de su Maestro, en contínua oración y vigilia con «María,
la madre de Jesús…» (Hechos 1:14)

La presencia del Espíritu Santo en María (Lucas 1:35)
es innegable para quienes creen que las Escrituras del llamado Nuevo
Testamento son inspiradas y verdaderas en lo esencial.

Y que esa presencia es eterna, contínua y constante en María, lo
revela el análisis cuidadoso del versículo de Apocalipsis
(o Libro de la Revelación) citado en la cabeza de este documento.

María, la ternura divina

¿Cuál es el significado de que el profeta vea la mujer vestida de sol? Recordemos
que el tiempo en la visiõn cuando éso sucede es cuando el
Sexto Sello ha sido abierto. El Sexto Sello…el sexto día…la
sexta etapa.

¿Qué sucede el sexto día de la
Creación?

Veamos.

«Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó;
varón y hembra los creó.»
(Génesis 1:27)

Si para crear esa imagen de sí mismo en la Tierra, Dios debió
crear a un varón y a una mujer, entonces es natural deducir que
en Dios se encuentran una naturaleza masculina, simbolizada por el
Padre, y una femenina, simbolizada por la Madre.

Otra deducción lógica, sería el pensar que ambas potencias divinas, el
Padre y la Madre, poseen distintos atributos.

En el Padre la fuerza, la ley, el orden. ¿Y cuáles serán los atributos de
la parte femenina en Dios? Con toda seguridad la ternura, la caridad y
la comprensión infinita. Y si el Padre es eterno, la Madre también lo es.

El eterno femenino de Dios

Ese eterno femenino divino tomó forma de mujer. Así como el Verbo de Dios (otra de sus
potencias) tomó carne en Jesús, la Divinidad también pudo adoptar, para manifestar su parte femenina, la forma de una mujer, bendita entre todas las mujeres de todos los tiempos, y además «llena de gracia»? Esas palabras son
de Gabriel, uno de los altos espíritus que asisten a Dios, según el Evangelio de Lucas (Lucas 1:28 y 30)

Y existen buenos y leales cristianos que no aceptan la virginidad de esa bendita mujer, cuando sin titubeos aceptan la castidad
de su hijo Jesús. Y se apoyan para ese juicio en varios pasajes de los Evangelios y los Hechos, donde se menciona a los hermanos de Jesús (Mateo12:46/Mateo 13:55/Lucas 8:20) aunque esos mismos evangelistas nunca, en ningún caso, mencionan que esos hermanos sean también hijos de María.

Cuando José, viudo, toma por esposa a María la doncella,
es ya un varón de edad y se sabe con certeza que en ese momento
él tenía hijos con la que había sido su primera esposa ya fallecida: Jacobo

(o Santiago), José, Simón y Judas (Mateo 13:55).
Y por el contrario, las mismas Escrituras son muy cuidadosas en especificar que Jesús, sí es hijo de María
(Mateo 13:55/Marcos 6:3).
¿No habrían puesto el mismo cuidado en apuntar ese hecho si
ésto también fuera cierto tratándose de los
hermanos de Jesús por parte del padre terrenal? ¿No hubiera
el evangelista, en el pasaje de Marcos 6:3, redactado esa narración
de otro modo si no fuera por el hecho de que, precisamente, Jesús
era el único hijo de María?

Jacobo (conocido también como Santiago) a quien llamaban el
Justo, hijo de José y «hermano» de Jesús, quedó,
después de la crucifixión de Jesús, como líder
de los «nazoreanos», de los judíos que sí habían
creído que Él era el Mesías prometido. Jacobo muere
apaleado en las escaleras del Templo de Jerusalén en el año
62 de la Era Cristiana ¡cerca de los 80 años de edad! (Memorias
de Hegesipo, citado por Eusebio y Julio Africano/ Las Antigüedades
de Flavio Josefo)
Una simple operación aritmética
(80 – 62=18) arroja que cuando nació Jesús, ¡Jacobo tenía
que haber tenido cuando muy joven al menos 17 años! Y diversas fuentes
autorizadas cristianas primitivas (Eusebio y Orígenes)
aseguran que cuando Jesús nació, María tenía
escasos 14 años de edad; esto es, si Jacobo tenía 18 años y María tan sólo 14. ¿cómo entonces pudo ella haber sido madre de Jacobo si éste nació antes que ella?

Quizás quepa transcribir aquí una sorprendente versión
de cómo veían los seguidores de Jesús a María:

«En este tiempo murió,
la madre de Jesús,y fue enterrada en el mismo lugar donde había
sido crucificado éste, y se erigió una lápida en el
lugar. Sobre esa lápida los parientes de Jesús escribieron
las siguientes palabras: He aquí que ésta es una escalera
levantada sobre la tierra que llega al cielo, y por ella ascienden y
descienden los ángeles de Dios, y la Madre se regocija
aquí en sus hijos
. Aleluyah».
(Memorias de
Hegesipo citado por Eusebio /Hechos de los Nazoreanos de Julio Africano)

La presencia de María en el Tercer Tiempo. La mujer vestida de sol.

Un análisis reflexivo del pasaje de Apocalipsis 12:1
y versículos siguientes, nos puede arrojar ciertas deducciones:

  • La mujer es madre, pues se encuentra a punto de dar a luz.
  • Que esté vestida de sol, símbolo de luz, calor y
    vida, puede muy bien representar su calidad divina. ¿Qué
    otras visiones contenidas en la Biblia conceden esos atributos a otra
    persona?
  • La luna debajo de sus pies bien podría indicar que ha
    vencido su calidad material femenina (representa la menstruación
    en las mujeres) así como Cristo venció al mundo.
  • Y como corona, sobre su cabeza, doce estrellas que pueden
    simbolizar dos cosas sin que éstas sean excluyentes: Las doce
    tribus de Israel y los doce apóstoles de Jesús.

De cualquier manera, la presencia espiritual del eterno femenino de
Dios, como lo anunciara el profeta Juan, no podía faltar en este
Tercer Tiempo.

Las Profecías de Juan – El Apocalipsis y su cumplimiento


Hoy vengo a hablar a vuestro espíritu y a revelaros el contenido
de los Siete Sellos, el Libro de vuestra historia, de la Profecía,
de la Revelación y la Justicia.

Soy Yo quien ha venido a deciros que hoy vivís en el tiempo perteneciente
al Sexto Sello.

El libro que estaba sellado en los Cielos, se ha abierto en el
sexto capítulo; es el Libro de los Siete Sellos -al que los hombres llaman Apocalipsis o Revelación- que encierra sabiduría y justicia y que fue desatado por mi amor a vosotros para revelaros
sus profundas lecciones.

Era necesario que el libro divino se abriese y los hombres contemplaran
su contenido, para poder salvarse de las tinieblas de la ignorancia
que son el origen de todos los males que existen en el mundo.

¿Quién podía abrir ese libro? ¿Por ventura el teólogo, el científico o el
filósofo? No, nadie; ni siquiera los espíritus justos os podían revelar
su contenido, porque lo que el libro guardaba, era la sabiduría de
Dios.

Sólo Cristo, el Verbo, sólo Él, el amor divino, podía hacerlo;
pero, aún así, era necesario esperar a que los hombres estuviesen
en condiciones de recibir la divina revelación sin que quedaran ciegos
con el esplendor de mi presencia espiritual.

Tuvo la Humanidad que vivir cinco etapas de pruebas, de lecciones,
de experiencia y evolución para alcanzar el justo desarrollo que le
permitiera conocer los misterios que el Arcano de Dios guardaba para
los hombres.

Ved que la luz del Sexto Sello desatado está iluminando a vuestro
espíritu. El libro está abierto, porque del Primero al Sexto, los
Sellos han sido desatados.

 

Los Siete Sellos

Y ví en la mano derecha del que estaba sentado
en el trono un libro escrito por dentro y por fuera
sellado con siete sellos…
Apocalipsis 5:1

A través de Roque Rojas os hice comprender que estabais presenciando
la apertura del Sexto Sello, que se abría para vosotros el libro en
su sexto capítulo, en su sexta parte.

El hombre ha vivido cinco etapas en la Tierra, alentado por el
soplo divino del espíritu, a pesar de lo cual no ha comprendido el
sentido espiritual de la vida, la finalidad de su existencia, su destino
y su esencia; todo era un arcano impenetrable tanto para su mente
como para su espíritu, un libro sellado, cuyo contenido no llegaba
a interpretar.

Vagamente presentía la vida espiritual, pero sin conocer verdaderamente
la escala de elevación que acerca a los seres a Dios; ignoraba su
misión más alta en la Tierra y las virtudes y dones que forman parte
de su espíritu, para poder vencer en las luchas, elevarse sobre las
miserias humanas y perfeccionarse espiritualmente para habitar en
la luz eterna.

Ese Libro de los Siete Sellos es la historia anticipada de la existencia
de la humanidad, porque solamente Dios podía escribir la historia
de los hombres antes de que ellos la vivieran, y estando ese libro
encerrado en el misterio, para ser revelado su contenido a la Humanidad,
solamente una mano podía abrirlo, una mano santa y pura, una mano
perfecta, y ésa fue la del Cordero, la del mismo Dios, que conocisteis
a través de su enseñanza y su sacrificio en el Segundo Tiempo, sacrificio
sublime de amor; era la única digna de abrir aquel libro, porque no
hubo en la Tierra, ni en el Cielo, ni en el espacio, ni en ningún
mundo, espíritu que fuera digno de abrir y revelar el libro y su contenido
a los espíritus.
Los Siete Sellos son vuestra vida, son vuestra historia, vuestras
luchas, vuestros triunfos y caídas, vuestros sufrimientos, combates
y, al final, vuestra redención, llena de gloria, llena de himnos,
llena de festín espiritual a la diestra de vuestro Señor, en su propio
seno; pero ha habido confusiones entre mi pueblo, y después de esas
confusiones no he encontrado la verdadera preparación en mis portavoces,
para que Yo como Maestro, como Espíritu Santo, os saque de ellas.

 

Elías en el Tercer Tiempo y los 144,000 marcados.

Vi también a otro ángel que subía
de donde sale el sol y tenía el sello del Dios vivo;
y clamó a gran voz a los cuatro ángeles a quienes
se les había dado el poder de hacer daño a la tierra
y al mar, diciendo: No hagais daño a la tierra,
ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos
sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Señor.
Y oí el numero de los sellados: 144,000.
Apocalipsis 7:2-4

Hice volver a Elías en el Tercer Tiempo y así lo había Yo anunciado
como Maestro en aquel Segundo Tiempo, diciendo: -En verdad, Elías
ha estado entre vosotros y no lo habéis sentido. Yo volveré al mundo,
pero en verdad os digo: Antes que Yo, vendrá Elías.

Y como toda palabra del Maestro se cumple, en el Tercer Tiempo Elías
ha sido antes que Yo para venir a despertar a los espíritus, a hacerles
presentir que la hora del Espíritu Santo abría sus puertas; para decir
a todo espíritu que abriera sus ojos, que preparara su calza para
traspasar el umbral de la Segunda Era hacia la Tercera y para que
fuese más palpable la manifestación de Elías en este Tercer Tiempo,
Yo le hice comunicarse a través de un varón recto: Roque Rojas.

Fue la luz de Elías quien preparó a Roque Rojas, quien le iluminó
y le dio certeza delante de los presentes, quien dio testimonio diciendo:
-Yo soy el profeta Elías, el de la transfiguración sobre el monte
Tabor-. Habló de justicia, de cargos y de muerte y se estremecieron
los presentes en verdad, y aquel estremecimiento fue de fe, de confianza
y de entrega para el Señor.

Mas después de que Elías hubo preparado ese camino de la nueva comunicación
para que fuese la presencia del Padre en el Tercer Tiempo, una vez
que hubo preparado esa senda para que el Señor llegara a este mundo
por el conducto humano, y preparó el oído, el corazón y todo el ser
del hombre para escuchar con atención al Verbo del Espíritu Santo,
Elías quedó presente espiritualmente entre la Humanidad, para despertar
a todos los dormidos, para purificar a todos los manchados, para envolver
en el fuego de su espíritu a todos los fríos, para trazar sendas,
veredas y caminos que atrajeran a todos los espíritus hacia el camino
de verdad.

Porque Elías no solamente trabaja en este pueblo; su espíritu en su
lucha abarca a toda la Humanidad; y cuando él se hubo manifestado
a través de Roque Rojas, se abrieron las puertas del Tercer Tiempo
para el mundo, porque es el tiempo en que comenzaron a llegar aquellos
espíritus de los 144,000 que habrían de encarnar.

Roque Rojas fue el primer marcado. De espíritu a espíritu le hablé
diciéndole: En verdad, en torno a mi palabra vendrán las grandes multitudes
a recrearse, mas como son pequeños todavía, tendré que manifestar
mi palabra y mis obras a través de los portavoces, quienes, por mi
mandato, señalarán en su frontal material un triángulo para hacerles
reconocer que son de los 144,000, que son de aquéllos que Yo anuncié
a través de otro profeta desde el Segundo Tiempo, para venir a cumplir
en este tiempo una delicada y gran misión entre la humanidad, misión
de redención, de espiritualidad y de elevación.

En el Segundo Tiempo fueron doce los discípulos que esparcieron
mi Doctrina por el mundo. En el Tercero doce mil de cada tribu serán
los que hagan conocer mi enseñanza de verdad y de amor a toda la Humanidad.

¿En dónde están esos ciento cuarenta y cuatro mil? Elías los está
reuniendo sin que sea obstáculo que unos se encuentren en espíritu
y otros encarnados. Todos estarán unidos espiritualmente en esta Obra
divina.

Grandes acontecimientos contemplaréis, muchos de ellos os sorprenderán,
mas Yo os daré la luz con mis lecciones, para que nunca os confundáis.
Estudiad mi palabra, que ella os inspirará amor a vuestro Padre y
a vuestros hermanos.

No es necesario formar parte de los ciento cuarenta
y cuatro mil, para poder servir al Padre o nombrarse discípulos del
Maestro. Los que forman parte de ese número, sólo son los que tienen
que abrir el camino y ser como guardianes de mi Obra.

A través de Roque Rojas os hice comprender que estabais presenciando
la apertura del Sexto Sello, que se abría para vosotros el libro en
su sexto capítulo, en su sexta parte.

Elías no desató los Siete Sellos, ni vino a implantarlos a vuestra
nación. Roque Rojas no desató los Siete Sellos.

El Libro de los Siete Sellos lo desaté Yo mismo. Solamente Dios podía revelar a sus hijos
las intimidades, los arcanos de El mismo; bien está que a través de
mis profetas y de mis apóstoles, el Espíritu Santo os reveló grandes
lecciones, pero solamente vuestro Señor es Aquél que puede abrir su
corazón para que vosotros contempléis su interior.

Los profetas os han hablado en sentido figurado y el Padre ha traído para vosotros
la realización y el cumplimiento de las profecías.

 

María, la mujer vestida de sol

Apareció en cielo una gran señal:
una mujer vestida del sol, con la luna
debajo de sus pies, y sobre su cabeza
una corona de doce estrellas

Apocalipsis 12:1

Cuando Juan, mi discípulo, se encontraba en su retiro solitario
en la isla de Patmos donde recibió las grandes revelaciones de los
tiempos venideros, donde penetró espiritualmente en el Más Allá, contemplando
los grandes misterios del Señor encerrados en símbolos, representados
por figuras, allí también contempló la figura de María.

En esa gran revelación confiada por el Padre a Juan para los hombres
de las eras venideras, ahí el profeta, después de una gran señal,
contempló a una mujer vestida de sol y la luna debajo de sus pies
y una corona formada sobre su sien por doce estrellas.

Aquella mujer sentía dolores de parto, y cuando aquel dolor era más intenso vio
Juan a la maldad en forma de dragón acechándola, esperando solamente
el nacimiento del hijo para devorarlo.

Y el Maestro os dice: Si esa revelación, dada por el Padre a Juan,
hablaba de los tiempos venideros, Yo os digo: Él vio a María en el
Tercer Tiempo próxima a dar a luz al pueblo mariano y a la maldad
acechando al pueblo del Señor.

Juan contempló también que en el instante del nacimiento se entablaba
una gran batalla de ángeles contra el dragón que simbolizaba la maldad
humana, una batalla que es la que ahora tenéis, porque el pueblo mariano
ha nacido, ya ha surgido sobre el haz de la Tierra y hoy se encuentra
recibiendo su escudo y su espada de amor para penetrar en la gran
batalla final.

Eso significa esta revelación, oh pueblo amado. Por eso el Padre
os ha dicho en este día: Los que dicen conocer a María, no la conocen
en su verdad, la miran solamente como mujer, la contemplan solamente
como madre humana y en torno a Ella han creado cultos, ritos, festines
y fanatismos. Por esa adoración idolátrica se han olvidado del cumplimiento
de las leyes del Señor, de la palabra del Maestro y de amarse losunos a los otros.
No es así como el Padre quiere que el mundo conozca a María, ni
es así como quiere que la amen. No es María solamente la mujer, ya
os lo he dicho: María es la esencia maternal que existe en lo divino
y que se manifiesta en todo lo creado.
Si la buscáis vosotros en la soledad de la noche, en el silencia
que nada perturba, allí en el Cosmos, su imagen encontraréis, y si
la buscáis en la fragancia de las flores también la encontraréis,
y si la buscáis en el corazón de vuestra madre, allí la tendréis.

Si vosotros la queréis encontrar en la pureza de la doncella, allí
la miraréis también, y así como en ella, en tantas y tantas obras
donde se refleja la imagen del eterno femenino que existe en Dios
y está en toda la Creación.
Cuando vosotros levantéis vuestra envoltura por los caminos del
cumplimiento, de la predicación de la enseñanza, tropezaréis con los
duros corazones, con aquéllos que han puesto una puerta hermética
para no dejar penetrar la esencia del amor de María ni su nombre;
para muchos, esa esencia no existe.

 

El Sexto Sello en que vivimos.

Miré cuando abrió el Sexto Sello
y he aquí que hubo un gran terremoto
y el sol se puso negro como tela de cilicio,
y la luna se volvió toda como de sangre…

Apocalipsis 6:12

Este tiempo, cuya aurora admiráis en el infinito, es la sexta etapa
que se inicia en la vida espiritual de la Humanidad, era de luz, de
revelaciones, de cumplimiento de antiguas profecías y olvidadas promesas.

Es el Sexto Sello que al desatarse desborda su contenido de sabiduría
en vuestro espíritu, en un mensaje lleno de justicia, de esclarecimiento
y de revelaciones.

Para vosotros es la sexta etapa, es el Tercer Tiempo en que os
he hablado más de cerca, como en aquel Primer Tiempo en que materialicé
en múltiples formas mi presencia y mi palabra, como aquel Segundo
Tiempo en que humanicé mi Verbo para hablaros al corazón.

Hoy me hago oir nuevamente, pero ya no es a los sentidos a quienes
me manifiesto, ni siquiera es a vuestro co razón a quien le hablo;
es vuestro espíritu con el que vengo a comunicarme para enseñarle
el camino de la elevación que conduce al Reino de la luz, al Reino
eterno y venturoso del Espíritu.

¿Qué guarda en su seno el Sexto Sello desatado del libro de Dios,
donde están escritos vuestros nombres y vuestros destinos? Encierra
enseñanzas, pruebas muy grandes, revelaciones de sabiduría.

¿Cuál es la misión de mis siervos dentro de esta etapa? Orar, meditar,
regenerarse, sembrar unión, paz y luz espiritual, desarrollar vuestras
facultades y potencias, luchar por vuestra elevación, destruyendo
la ignorancia, el vicio, el fanatismo: en una palabra, el mal que
en tantas formas se manifiesta entre la Humanidad.

El Séptimo Sello, la etapa final de la humanidad.

Cuando abrió (el Cordero) el séptimo sello
se hizo silencio en el cielo como por media hora

Apocalipsis 8:1

¿Cuáles señales os daré para que podáis mundialmente reconocer
que el Séptimo Sello se abre para el hombre? Cuando se haya hecho
un gran silencio en el Universo, ésa será mi señal.

Y ¿cómo será ese gran silencio, oh pueblo, con el cual podáis vosotros
testificar ante la Humanidad asombrada que es el final de una etapa
y el principio de otra?

Cuando hayan cesado por un momento las guerras, cuando los elementos
se hayan apaciguado, cuando la persecución de mis leyes y mi Doctrina
se haya detenido; entonces, habrá como un gran silencio entre la Humanidad
y ese silencio será el anuncio de que el Séptimo Sello se abre para
revelar sus misterios a esta Humanidad. Es la última parte del Libro
que habréis de conocer, que ha de poseer vuestro espíritu para que
conozca al Padre y se conozca a sí mismo.

A grandes pasos se acerca la Humanidad hacia el fin de ese mundo
creado por la ciencia del hombre, de ese mundo falso y superficial;
y será el hombre quien por propia mano destruya la obra que su orgullo
y su codicia construyeron. Luego vendrá el silencio, la meditación
y con ello la regeneración, los propósitos y los ideales elevados.

Ante los hombres se abrirá una nueva era, y en ella penetrará una
Humanidad purificada en el dolor y acrisolada en la experiencia. Un
nuevo mundo levantarán los hombres, pero será un mundo guiado por
el espíritu, iluminado por la conciencia, encauzado por el camino
de mi Ley.

Cuando los hombres hayan dejado de odiarse, de matarse y de traicionarse,
cuando el perdón y la caridad se hayan extendido de corazón en corazón,
de pueblo en pueblo, y la sangre y las lágrimas ya no corran, entonces
se hará el gran silencio que significa la comunicación de espíritu
a Espíritu; entonces Yo habré desatado el último sello, el Séptimo,
en cuya etapa los hombres se amarán como os enseñé cuando vine a la
Tierra.

Las transformaciones que la vida humana sufra serán grandes, tanto,
que os parecerá como si un mundo se acabara y otro naciera.

Esta Tierra que siempre ha enviado al Más Allá una cosecha de espíritus
enfermos, cansados, turbados, confundidos o con escaso adelanto, pronto
podrá ofrecerme frutos dignos de mi amor.

La enfermedad y el dolor se irán desterrando de vuestra vida al
llevar una existencia sana y elevada, y cuando llegue la muerte os
encontrará preparados para el viaje hacia la mansión espiritual.

Ahora os parece inalcanzable tanta paz y tanto bien, y es porque
miráis toda la confusión que reina en torno a vosotros, confusión
que sabéis irá aumentando en todos los órdenes de la vida humana.

Mas Yo os digo que confiéis en Mí, que veléis, oréis y seáis los sembradores
incansables, para que esta noche tempestuosa deje asomar la luz de
la nueva aurora y la Tierra sienta cómo sus nuevos moradores vienen
a sembrarla con obras nobles, restaurando y reconstruyendo cuanto
los insensatos y profanos destruyeron y mancharon.

Sobre las ruinas de un mundo creado y destruido por una Humanidad
materialista, se levantará un nuevo mundo cuyos cimientos serán la
experiencia y tendrá por finalidad el ideal de su elevación espiritual.

Pensad en el adelanto de una Humanidad cuya moral proceda de la
espiritualidad, imaginad una Humanidad sin límites ni fronteras, compartiendo
fraternalmente todos los medios de vida que la tierra ofrece a sus
hijos.

Tratad de imaginar lo que será la ciencia humana cuando ella tenga
por ideal el amor de los unos a los otros, cuando el hombre obtenga
a través de la oración los conocimientos que busca.

Pensad en lo grato que será para Mí recibir de los hombres el culto
del amor, de la fe, de la obediencia y la humildad a través de su
vida, sin que tengan que recurrir a ritos ni a cultos externos.

Ésa sí será vida para los hombres, porque dentro de ella respirarán
paz, gozarán de libertad y se sustentarán solamente con aquello que
encierre verdad.

Los Hechos de Roque Rojas

La vida de Roque Rojas estuvo
impregnada de acontecimientos extraordinarios, muchos de los cuales
quedaron sellados por su modestia y humildad. Pero muchos otros fueron
recogidos por múltiples personas. He aquí algunos de esos
hechos:
 

    • Al ser bautizado por el sacerdote católico Filogonio
      Quezada, unas palomas volaron y se posaron sobre el niño,
      cantando. De ésto, quedó testimonio escrito en los
      reportes de la época al Arzobispado
    • A la edad de cinco años, vaticinó la muerte de los
      esposos Romero, causando el cumplimiento de su vaticinio azoro en
      quienes le conocían.
    • A la edad de doce años profetizó el paradero preciso
      de la niña Andrea, quien vivía en la hacienda de don Juan
      López Montiel, que había sido raptada y secuestrada por
      unos bandoleros y llevada al cerro del Tesoro, en los alrededores de la
      ciudad.
    • Cuando ya mayor, estudiaba en el Seminario de México, y en
      una ocasión en que su preceptor, Fray Antonio Vázquez,
      celebraba la misa, al voltear éste del altar vió que de lo
      alto de la capilla se desprendía una paloma llena de luz, y al
      posarse sobre la cabeza de Roque Rojas desaparecía.
    • A finales de ese mismo año de 1861, curó a un leproso
      e hizo hablar a una muda de nacimiento de la familia de Petra Ortiz.
    • El año de 1862 hizo volver la vista perdida a Onofre Martínez,
      hermano de Lucas Martínez.
    • Ese mismo año, en una visita que hizo al poblado de San Andrés
      Topilejo, cerca de la Ciudad de México, y a punto de ser
      apedreado por una multitud incitada por el cura católico del
      lugar, hizo ante numerosas personas el prodigio de hacer andar al Juez
      Civil de la localidad, quien era paralítico de nacimiento.
      Aprovechando el desconcierto de quienes le querían sacrificar,
      pudo salvar la vida.
    • El año de 1863 resucitó, dos días después
      de haber fallecido, a la señora Refugio Valverde, esposa de
      Porfirio Lopezcano de Santillán.
    • El 31 de Mayo de 1868, en la Calle del Ciprés y de las
      Flores de la Ciudad de México, celebró Roque Rojas la
      marca espiritual de Benito Juárez, Presidente de México.
    • Poco tiempo después, ante el Cabildo de la Ciudad de México,
      hizo caminar una enorme mesa con sólo aplicar sus manos,
      partiendo en dos el mármol de dicha mesa.
    • Durante la Intervención Francesa, en el Cerro de la Estrella
      de Iztapalapa, cuando era perseguido por dos soldados franceses para
      matarle, al salir Roque Rojas de la cueva donde se hallaba oculto,
      vieron los soldados que éste se convertía en un sol
      radiante, y temerosos, cayeron arrodillados ante él.
    • El año de 1869 hizo brotar agua en la población de
      San Miguel Regla, en el estado mexicano de Hidalgo y lo bautizó
      llamándole El Nuevo Jordán.
    • En el pueblo de Atizapán de Zaragoza, en Tlanepantla, estado
      de México, también hizo brotar agua y bautizó el
      lugar llamándole El Pozo de Samaria.
    • Los emperadores impuestos por Francia para México,
      Maximiliano y Carlota, movidos a curiosidad por su fama de taumaturgo y
      profeta, lo hicieron llevar ante su presencia y entonces él les
      profetizó que un Habsburgo derramaría su sangre en el
      suelo de México y que México sería un país
      sin reyes. Ellos, creyéndolo loco (era el momento más
      álgido de su imperio) lo dejaron ir, considerándolo
      inofensivo.

Éstos fueron algunos de los hechos
singulares de la vida de Roque Rojas, elegido por Dios para manifestar
el espíritu de Elías, el Enviado del Tercer Tiempo


Bibliografía: Memorias sobre
Hechos de Roque Rojas y algunas anécdotas sobre sus antepasados»
. Gregorio Baldomero. 1914 / «Albores de la Nueva Venida del Señor.
El Enviado», Folletos de «El Redentor». 1970


El fin del Mundo

Las falsas interpretaciones materiales

Este temido fin de este mundo no llegará de acuerdo a tantas y diversas interpretaciones humanas, religiosas, filosóficas, etc. debido a que siempre se analizan en el sentido material las profecías, en este caso las profecías bíblicas.

Las interpretaciones materialistas hacen que muchos vivan con el temor y el miedo de que de un momento a otro se cumplan las profecías según ellos y «adiós, mundo cruel»; otros, sin embargo, que se creen escogidos esperan que en este fín del planeta el juicio les sea favorable y entonces pasen a gozar de una vida eterna que creen haberse ganado, mientras que los demás que no creyeron tendrían como destino el famoso fuego eterno.

¿Y después qué pasará? Pues nada… bueno, lo que va a pasar es exactamente lo que el Padre (Dios) nos ha dicho en este tiempo y que es que

….el fín de nuestro mundo de maldad no es el fín del planeta…
 

La idea de que el mundo va a terminar, como muchas interpretaciones en el sentido material, hace que no se comprenda una verdad espiritual, pura y limpia como es la palabra de Dios.

El fin del mundo de iniquidad

Es tan grande la creencia en esta idea del fin del mundo, que muchos apostarían su propia vida, y aseguran que el final será por una catástrofe de proporciones «bíblicas»; sin embargo la voluntad divina está sobre toda falsa interpretación.

¿Y cual es esa voluntad divina? ¡Que por nosotros mismos se lleve a cabo ese fin del mundo que Él nos ha señalado, o sea que será causado por todos nuestros graves errores manifestados en tantas y diversas formas.

Somos nosotros y no Él quienes podemos y debemos destruir este mundo cruel que hemos formado a través de los tiempos.

Él no va destruir lo que nosotros hemos construído.

Un error de siglos

Y si muchos piensan que este fín será para el año dos mil, entonces es una prueba contundente que siempre no hubo fin del mundo, porque de acuerdo a cierto error de datación cometido allá por el año 350, alguien se equivocó en la fecha del nacimiento de Jesús por 7 años de retraso, por lo tanto realmente ya estamos alrededor del 2007. Es decir, el año 2000 ya trasnscurrió…y no pasó nada.

Esta profecía, como la que habla del Advenimiento del Espíritu Santo, las nociones del infierno, el cielo, la gloria, la muerte, y tantas otras más a las cuales se les ha dado la interpretación humana y material, traerá como resultado una sorpresa tan grande como es la que al final de cuentas NO HAY FIN DEL MUNDO.

La Primera Portavoz del Tercer Tiempo

Damianita Oviedo en su vejez

La Doncella Elegida

El 24 de Diciembre de 1863 Roque Rojas funda el primer recinto de seguidores de la manifestación de Elías en el Tercer Tiempo. Ese día «marca» a doce varones y doce mujeres en representación del pueblo espiritual de Israel.

De las doce mujeres, las siete primeras fueron vírgenes en representación de los Siete Sellos, y en sexto lugar toca a Damiana Oviedo, joven doncella, llevar la representación del Sexto Sello.

Años después, para conmemorar la Pasión del Señor Jesús, en 1869, Roque Rojas preparó con anticipación un acto solemne, mas encontrando entre aquéllos que le seguían fanatismo e impreparación, exasperado ante la incomprensión de su  pueblo, destruyó el contenido de un arca donde eran conservadas las revelaciones escritas por él, y procedió a clausurar aquel lugar.

Damiana Oviedo recogió los fragmentos del arca y los guardó.

El año de 1879, diez años después, Roque Rojas falleció (Ver Roque Rojas) y Damiana continuó reuniéndose en su hogar con algunos de los fieles y perseverantes seguidores de Roque Rojas.

Hasta que un día, en Mayo de 1884, entrando en un profundo éxtasis espiritual, Damiana recibe por vez primera la inspiración del Rayo divino a través de su entendimiento, iniciándose con ello el cumplimiento de las profecías entregadas en los tiempos anteriores y dando paso al Advenimiento del Señor.

Desde esa primera revelación, el Espíritu de Verdad entregó las profecías de los tiempos venideros para ese pueblo. Y en ellas se anunciaban el cese de la comunicación por el entendimiento humano para el 31 de Diciembre de 1950, el crecimiento del número de seguidores y de lugares donde se recibiera la palabra divina y las luchas que habrían de dividir al pueblo del Señor al final de esa etapa.

Fue Damiana Oviedo, «Damianita» como cariñosamente la llamaban quienes la conocían, un baluarte entre su pueblo, y todavía el día de hoy, tiempo después de su fallecimiento a edad provecta, es espíritu de luz que vigila sobre los discípulos del Espíritu Santo.

Las Profecías Cumplidas – Parte VI

Este artículo pertenece al tema de Las Profecías Cumplidas. Parte 6 de 7

La séptima trompeta.



El séptimo ángel tocó la trompeta
y hubo grandes voces en el cielo….

Todo está siendo preparado para que el Séptimo
de los sellos sea abierto a la Humanidad. La voz
del Señor a través de sus escogidos y profetas,
a través de los elementos desatados y de Su
palabra entregada en este tiempo, está
despertando a todos los que han permanecido
dormidos por siglos. El tiempo de la iniquidad
de los hombres está llegando al límite y su fin
está próximo dando paso a un reinado de amor
y de justicia para todos. El reino del mal será
vencido en todo el planeta y el bien tomará raíz
dentro de los hombres por siempre.


"Y le fue dado dominio, gloria y
reino, para que todos los pueblos,
naciones y lenguas le sirvieran; su
dominio es dominio eterno, que nunca
pasará, y su reino uno que no será
destruido."
   Daniel 7:14



Y los veinticuatro ancianos
que estaban sentados....
"Como incienso agradable os aceptaré,
cuando os haya sacado de entre
los pueblos, y os haya congregado
de entre las tierras en que estáis
esparcidos; y seré santificado en vosotros
a los ojos de las naciones"
	Ezequiel 20:41


Esos veinticuatro ancianos que contemplara Juan en su revelación son el símbolo de las doce tribus de Israel y los doce apóstoles del Divino Maestro. Aquellos espíritus que venciéndose a sí mismos y a sus pasiones, han sido dignos de recibir el galardón que el Señor guardaba para entregárselos al final de los tiempos.



"....si hijos, también herederos;
herederos de Dios y coherederos
con Cristo, si es que padecemos
juntamente con él, para que juntamente
con él seamos glorificados.
Romanos 8:17

Y se airaron las naciones
Y tu ira ha venido....



El día del Juicio ha comenzado; mas son muchos los que aún niegan la veracidad de las profecías, y los que siguen insistiendo en que todo cuanto sucede en el planeta nada tiene que ver con ellas, afirmando que todo es producto de la coincidencia o la casualidad. Otros consideran las palabras de los profetas como testimonios de seres fatalistas y enajenados; mas aquellos que se han dedicado al estudio y análisis de las señales, saben que son verdaderas, que todas las señales que estaban profetizadas para este tiempo se han cumplido una a una y que será el cumplimiento de las que están por venir lo que haga despertar a la Humanidad.


Cuando los elementos unidos en una sola voz respondan a las agresiones de los hombres aún con más violencia de la que han manifestado hasta ahora; cuando más constantes y terribles enfermedades surjan entre los hombres como respuesta a sus excesos; cuando el mal en todas direcciones parezca ganar la batalla contra el bien, entonces será cuando la Humanidad comprenda que el uso equivocado de su libre albedrío ha llegado al límite.



"Viene el fin, el fin viene; se ha
despertado contra ti; he aquí que viene.
La mañana viene para ti, oh morador
de la tierra; el tiempo viene, cercano
está el día; día de tumulto, y no de alegría
sobre los montes.
Ahora pronto derramaré mi ira
sobre ti, y cumpliré en ti mi furor,
y te juzgaré según tus caminos; y
pondré sobre ti tus abominaciones."
   Ezequiel 7:6-8

Y el templo de Dios fue abierto
En el cielo....



Mas después de la purificación, vendrá la paz a todo el planeta, y lo que hasta ahora la Humanidad ha considerado imposible será una maravillosa realidad. Todo lo inútil y supérfluo será destruído, la soberbia, el egoísmo y la hipocresía serán desterrados. Regresarán los gobernantes justos y se volverá a fortalecer la unión de las familias; las fronteras no existirán más y las costumbres y las buenas ideas de los pueblos se entrelazarán para formar un mundo nuevo. Las caídas y errores de la Humanidad y el sufrimiento que de ellas haya recogido, serán las experiencias que lo ayuden a elevarse teniendo el verdadero conocimiento de lo que es el bien y el mal. La enfermedad será erradicada del planeta y la ciencia será dedicada al progreso del bien. Llegarán los grandes guías, los grandes patriarcas, los jueces justos. Entonces todos los seres percibirán la cercanía del Reino de Dios y Su presencia será sentida por todos.


«….tengo por cierto que las
aflicciones del tiempo presente no son
comparables con la gloria venidera
que en nosotros ha de manifestarse.»
Romanos 8:18

Y el Arca de su pacto se veía en el templo….


Cuando la lección haya sido comprendida, se levantará en el interior de cada espíritu el tabernáculo del Señor, el templo en el cada uno le entregará una ofrenda digna y elevada, en la que el espíritu de toda la Humanidad se levantará para lograr la comunicación de espíritu a Espíritu prometida por Dios para sus hijos; en ella la voz del Padre Celestial será escuchada por cada uno y el acatamiento de las Leyes divinas llegará a su corazón, convirtiendo a la Ley que hasta entonces había sido un freno para las pasiones humanas, en una forma natural de ser y de vivir..


Será entonces cuando el Arca de la Nueva Alianza, que es el símbolo de la Doctrina Espiritualista que Dios ha entregado en este Tercer Tiempo, sea comprendida y practicada por todos los hombres como símbolo del nuevo pacto de los hijos con el Padre. La sabiduría de su Enseñanza será guía, luz, báculo y consuelo para toda la Humanidad.

Las Profecías Cumplidas – Parte V

Este artículo pertenece al tema de Las Profecías Cumplidas. Parte 5 de 7

La Mujer Vestida del Sol. La presencia espiritual en el Tercer Tiempo de María, la Madre Celestial.


Apareció en el cielo una gran
señal: una mujer vestida del sol,
con la luna debajo de sus pies, y sobre
su cabeza una corona de doce estrellas.
Apocalipsis 12:1

Así como Dios se manifiesta a sus hijos como Padre, Hijo y Espíritu Santo, también se manifiesta como Madre. Esa mujer de la visión de Juan, representa el Eterno Femenino de Dios, la Ternura Divina que se acerca a sus hijos a través de la imagen de María, la Madre Universal.


....y sobre su cabeza
una corona de doce estrellas....

Las doce estrellas son el símbolo de las doce tribus de Israel, que a su vez representan a toda la familia universal (Génesis 37:9).


"....de cierto te bendeciré, y multiplicaré
tu descendencia como las estrellas
del cielo y como la arena que
está a la orilla del mar....
....en tu simiente serán benditas todas
las naciones de la tierra....
Génesis 22:17,18




La presencia de María, la madre espiritual de la Humanidad, ha sido testificada constantemente desde tiempos remotos por los hombres. En algunos lugares, la presencia de la Madre Celestial ha sido creída, mientras que en otros no; así mismo, su mensaje ha sido comprendido por unos en toda su magnitud espritual, y por otros ha sido tomado como motivo de cultos fanáticos. Sin embargo, lo que todo esto quiere decir, es que la presencia de María, la Ternura Divina, ha sido sentida siempre en todo el planeta.

Las Visiones Marianas

Los reportes que se tienen de estas manifestaciones marianas podrían contarse por cientos, y aunque muchas de ellas aún no han sido reconocidas como la presencia de la Madre Universal, y muchas otras se le han atribuído sin ser realmente manifestaciones marianas, son acontecimientos que en este Tercer Tiempo, perteneciente al Sexto Sello, se han multiplicado por todas partes en cumplimiento de la profecía, para sensibilizar a los hombres hacia lo espiritual, y hacer que toda la Humanidad, desde sus diferentes fuentes de pensamiento, medite en el contenido de las profecías y se replantee la presencia de María como el Eterno Femenino de Dios.

Mencionaremos solamente algunas apariciones que hasta ahora se han considerado auténticas, y que han sido aceptadas como manifestaciones marianas:

Año 40. Zaragoza, España. Aparición a Santiago apóstol.

Año 352. Roma, Italia. Aparición simultánea en sueños a un noble romano llamado Juan, a su esposa y al Papa Liberius.

Año 1347. Siena, Italia. Aparición a la llamada Santa Catarina.

Año 1531. México. Apariciones y mensajes de la llamada virgen de Guadalupe al indio Juan Diego.

Año 1600. Agreda, España. Apariciones Marianas de la que llamaron María de Agreda.

Año 1830. Rue Du Bac, Francia. Apariciones a Catherine Laboure.

Año 1840. Blangy, Francia. Apariciones a Justine Bisqueyburu.

Año 1856. La Salette, Francia. Apariciones a Melanie Calvat y Maximin Giraud.

Año 1858. Lourdes, Francia. Apariciones a Bernadette Soubirous.

Año 1877. Gietrzwald, Polonia. Apariciones a Justyna Szafrynska y Barbara Samulowska.

Año 1879. Knock, Irlanda. Apariciones colectivas a 15 personas del lugar.

Año 1884. Roma, Italia. Apariciones al Papa León XIII.

Año 1904. Polonia. Apariciones a Maximilano Kolbe.

Año 1917. Fátima, Portugal. Apariciones por seis meses consecutivos a tres niños cuyos nombres eran: Lucía, Francisco y Jacinta.

Año 1932. Beauraing, Bélgica. 32 Apariciones y mensajes recibidos por cinco niños.

Año 1933. Banneaux, Bélgica. Apariciones a Mariette Beco.

Año 1937. Polonia. Apariciones y mensajes entregados a Helen Kowalska.

Año 1961. San Sebastián de Garabandal, España. Se registraron 2000 apariciones en un período de cinco años, y se recibieron mensajes a través de cuatro diferentes personas.

Año 1968. Zeitun, Egipto. Apariciones vistas por más de un millón de personas por tres años, en la cúpula de una iglesia cóptica. Las apariciones fueron televisadas e incluso presenciadas por el presidente Abdul Nasser. Dichas apariciones duraron desde unos minutos hasta nueve horas contínuas, y muchos protestantes que atestiguaron esas apariciones han variado radicalmente su punto de vista acerca de la divinidad de María.

Año 1973. Akita, Japón. Apariciones a Agnes Sasagawa.

Año 1980. Cuapa, Nicaragua. Apariciones a Eduardo Bernardo Martínez.

Año 1990. Litmanova, Slovakia. Apariciones a Ivetka Korcakova y Katka Ceselkova. Las apariciones duraron hasta el año de 1995.

Testimonios marianos en el mundo entero

Aún cuando siguen siendo estudiadas y todavía no han sido avaladas como auténticas, vale la pena mencionar varias apariciones que han capturado la atención de muchos creyentes:


1981-1989. Kibiho, Rwanda, Africa. Las apariciones y mensajes de los que fueron testigos un grupo de cinco niñas y un niño por un período ocho años.


1986. Manila, Filipinas. La aparición de María, la Madre Universal, el día 25 de Febrero de ese año, a un grupo de soldados que siendo comandados por Ferdinand Marcos, estaban a punto de atacar con sus tanques a millones de civiles. Este grupo de soldados al ver la aparición y escuchar la voz de la Madre Celestial que les pedía que no hicieran daño a sus hijos, abandonando los tanques se mezclaron entre los civiles y se negaron a atacar.


1991-1998. Las aparicioneses que están sucediendo en Medjugorge, Bosnia-Herzegovina. Donde desde Junio de 1981 y hasta la fecha, un grupo de seis jóvenes han sido testigos de apariciones y mensajes de la que ellos aseguran es la virgen María. Millones de peregrinos han visitado el lugar de dichas apariciones hasta el día de hoy.


1998. Georgia, USA. Las apariciones que actualmente están sucediendo en Congeos, Georgia; donde el 13 de Octubre de este año, cien mil peregrinos procedentes de diferentes lugares de los Estados Unidos, se reunieron para ser testigos de la aparición de la virgen María en una granja que se encuentra situada a unos kilómetros al este de Atlanta, donde se afirma que la virgen aparece y entrega mensajes cada mes, a una mujer llamada Nancy Fowler.


La lista es interminable, y podríamos seguir mencionando apariciones en los años recientes en todo el planeta, como las que se han dado en: Syria (1982), Ukrania (1954, 1970, 1987), Italia (1985), Bolivia (1994-1998), Argentina (1983), Brazil (1987), Australia (1986), Estados Unidos (1988-1996), Puerto Rico (1953), China (1978), Korea (1985), Vietnam (1974-1975), Africa (1986), Francia (1974), etc. etc.


Apocalipsis 12:2. La Madre Universal


Y estando en cinta, clamaba con
dolores de parto, en la angustia del
alumbramiento.
    Apocalipsis 12:2


Las enseñanzas divinas, en muchas ocasiones no han sido comprendidas en toda su magnitud, y esa falta de análisis ha llevado a los hombres a hacer conjeturas equivocadas. Aquellas palabras que dijera Jesús a su madre María y al apóstol Juan, cuando juntos lo acompañaban a los pies de la cruz, fueron un mensaje a través del cual, el Mesías entregaba a su madre al apóstol, como un símbolo de la entrega del amor maternal a toda la Humanidad.


"Cuando vio Jesús a su madre, y al
discípulo a quien él amaba, que estaba
presente, dijo a su madre: Mujer, he
ahí a tu hijo.
Después dijo al discípulo: He ahí
a tu madre....".
   Juan 19:26,27

....y estando en cinta, clamaba
con dolores de parto....
"¿Quién oyó cosa semejante? ¿quién
vio tal cosa? ¿Concebirá la tierra en
un día? ¿Nacerá una nación de una
vez? Pues en cuanto Sion estuvo de
parto, dio a luz sus hijos.
Yo que hago dar a luz, ¿no haré
nacer? Dijo Jehová. Yo que hago
engendrar, ¿impediré el nacimiento?
dice tu Dios.
   Isaías 66:8,9


La Madre Celestial se prepara para dar a luz; mas su maternidad en este tiempo perteneciente al Sexto Sello, es el símbolo del alumbramiento de un pueblo, un nuevo género humano, el pueblo mariano que ha surgido en este tiempo y que es el Israel espiritual. El clamor de la mujer ante la cercanía del parto, representa el sufrimiento de la Ternura Divina por la purificación que tendrá que vivir la Humanidad.


1884-1950. Al igual que el Padre ha entregado su mensaje en este Tercer Tiempo, la Madre, como símbolo de su «alumbramiento» se ha manifestado a los hombres de esta Era, y como testimonio de su presencia, ha legado su mensaje de amor a sus hijos a través del entendimiento humano de humildes portavoces. Un mensaje sencillo en su forma, pero profundo y espiritual en su contenido:


"El espíritu de María es con vosotros.
Mi presencia invisible, sentida por quienes han sabido
prepararse espiritualmente, es verdadera.
Me place visitar a mi pueblo mariano,
para que sienta cerca de su corazón mi presencia,
para que escuche mi voz maternal con el amor
y confianza con que el niño suele oir los relatos
que su madre le hace".
El mensaje de María. Capítulo 1:1,2

La gran lucha entre el bien y el mal.


También apareció otra señal en el
cielo: He aquí un gran dragón escarlata,
que tenía siete cabezas y diez
cuernos, y en sus cabezas siete
diademas;
y su cola arrastraba la tercera parte
de las estrellas del cielo, y las arrojó
sobre la tierra. Y el dragón se paró
frente a la mujer que estaba para dar
a luz, a fin de devorar a su hijo tan
pronto como naciese.
    Apocalipsis 12:3,4
....he aquí un gran dragón....


El dragón, es la serpiente antigua con la que todos los iluminados han ejemplificado al mal desde los primeros tiempos (Génesis 3:1); su color escarlata es símbolo de la purificación y sufrimiento que ese dragón ha hecho padecer a esas «estrellas» caídas del cielo, las cuales representan a los espíritus que han tenido que venir a morar a la Tierra, convertidos en esta Humanidad que está viviendo las consecuencias de haberse dejado arrastrar por esa serpiente que es símbolo de la maldad humana y de sus imperfecciones.


"Y se engrandeció hasta el ejército
del cielo; y parte del ejército y de las
estrellas echó por tierra, y las pisoteó."
   Daniel 8:10
....tenía siete cabezas
y diez cuernos....


En la medida en que ha crecido la Humanidad, el mal se ha multiplicado (ese es el símbolo de las siete cabezas), y se ha enseñoreado del mundo manifestándose de muchas maneras, a las que los hombres han dado fuerza y han puesto coronas y han revereciado como reyes y adorado como dioses.


Esa fuerza o influencia del mal está formada por pensamientos, ideas, actos, sentimientos y pasiones. Sus armas son: la soberbia, la ambición, el odio, el poder terrenal, la lujuria, la vanidad, el egoísmo, la mentira, la idolatría y el fanatismo (representadas por los diez cuernos). Todas ellas fuerzas nacidas del corazón humano que debilitan al espíritu.

La amenaza del dragón

.	...Y el dragón se paró frente
a la mujer que estaba para dar a luz....


Grande es la amenaza, y la lucha será en todos los órdenes de la vida humana. «El dragón» espera para devorar a todos aquellos que formen parte del pueblo mariano; esto es, a todos aquellos que estén dispuestos a formar parte del pueblo del Señor, del ejército del bien.


Y ella dio a luz un hijo varón,
que regirá con vara de hierro a todas
las naciones; y su hijo fue arrebatado
para Dios y para su trono.
Y la mujer huyó al desierto, donde
tiene lugar preparado por Dios, para
que allí la sustenten por mil doscientos
sesenta días.
    Apocalipsis 12:5, 6


Aquí, la Revelación de Juan, nos habla en un mismo versículo de tiempos diferentes, para hacernos comprender el significado de la profecía. Este último pasaje, al relacionarse con los tiempos que Daniel mencionara, ha reicibo muchas interpretaciones al paso de los años, incluyendo la de Sir Isaac Newton, el célebre científico inglés de origen judío, quien en su libro «Las Profecías de Daniel» aseguraba que el primer regreso del remanente del pueblo judío se cumplió exactamente a los 490 años de la primer exilio en Babilonia, en el año 450 A.C., en el reinado de Artajerjes; los siguientes 490 años de los que habla Daniel se completaron en el año 33 de la Era Cristiiana.


....dió a luz un varón que regirá
con vara de hierro a las naciones....


En el Salmo 2:9, aparece este versículo como promesa de la llegada del Mesías: «Los quebrantarás con vara de hierro; como vasija de alfarero los desmenuzarás»; después, Juan en Apocalipsis 2:26 y 27 recibe la promesa para darla a aquellos que creyendo en su palabra han aguardado el regreso del Señor en este tiempo:


"Al que venciere y guardare mis
obras hasta el fin, yo le daré autoridad
sobre las naciones,
y las regirá con vara de hierro, y
serán quebrantadas como vaso de alfarero...."
   Apocalipsis 2:26,27


Después, al hacer mención de esta misma promesa en Apocalipsis 12:5, el profeta nos hace comprender en una sola frase, que la profecía está hablando: por un lado, del hijo a quien en este tiempo se ha hecho la promesa, osea el pueblo de Dios, el pueblo mariano; y por otro lado, del Mesías, el Hijo que en el Segundo Tiempo fue sacrificado y devorado por el dragón que es la incomprensión humana, por la cual, volvió al seno Paterno, para esperar su regreso en este que es el tiempo del cumplimiento de las profecías. Unos hijos y Otro coinciden en ese alumbramiento maravilloso que la Madre está entregando a la Humanidad de esta Era.


Y la mujer huyó al desierto....
....por mil doscientos sesenta días


Al igual que en el capítulo 11 versículo 3 de esta profecía, en el que los días simbolizan el tiempo de espera para el regreso de los dos olivos; en esta parte, la profecía nos habla de los mismos mil doscientos sesenta días, que son también el símbolo de ese lapso de espera que la Madre ha tenido que aguardar después del sacrificio de su Hijo, para volver a manifestarse en esta Tercera Era y dar a luz al pueblo mariano, el cual está surgiendo por todos los confines de la Tierra. 180 semanas que simbolizan los tres años y medio -dos tiempo, un tiempo y un poco más- de los que habla Daniel.

La batalla en el cielo


Después hubo una gran batalla en
el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban
contra el dragón y sus ángeles;
pero no prevalecieron ni se halló
ya lugar para ellos en el cielo.
Y fue lanzado fuera el dragón,
la serpiente antigua, que se llama
diablo y Satanás, el cual engaña al
mundo entero; fue arrojado a la Tierra,
y sus ángeles fueron arrojados con él.
Entonce oí una gran voz en el
cielo que decía: Ahora ha venido la
salvación, el poder, y el reino de
nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo;
porque ha sido lanzado fuera el
acusador de nuestros hermanos, el que
los acusaba delante de nuestro Dios
día y noche.
Y ellos le han vencido por medio
de la sangre del Cordero y de la palabra
del testimonio de ellos, y menospreciaron
sus vidas hasta la muerte.
Por lo cual alegraos, cielos, y los
que moráis en ellos. ¡Ay de los moradores
de la tierra y del mar! Porque
el diablo ha descendido a vosotros
con gran ira, sabiendo que le queda poco
tiempo.
    Apocalipsis 12:7-12

....Miguel y sus ángeles
luchaban contra el dragón....
"En aquél tiempo se levantará
Miguel, el gran príncipe que
está de parte de los hijos de tu pueblo;
y será tiempo de angustia, cual
nunca fue desde que hubo gente hasta
entonces...."
   Daniel 12:1



La lucha del bien contra el mal nunca ha cesado; comenzó desde el día en que un grupo de ángeles dominados por su enorme soberbia, decidieron que siendo hijos de Dios, al igual que Él crearían sus propios mundos y caminos, para ser tan grandes como El que los había creado (Génesis 3:4,5; Isaías 14:12-14).

Desde ese momento, miriadas de seres espirituales abandonaron el paraíso, que es la casa Paterna (Lucas 15:11-13), y vinieron a habitar la Tierra que ha sido hogar temporal de todos esos espíritus encarnados. Ella ha sido maestra incansable que los ha cobijado para que a través de las experiencias vividas en ella, esos espíritus tengan la oportunidad de aprender, evolucionar, y perfeccionarse en las pruebas y en el dominio de ese «dragón» apocalíptico, símbolo del mal, y de todas las imperfecciones humanas.

Muchos espíritus han ganado la batalla, y muchos otros se han hundido cada vez más en el abismo de sus propias pasiones, formando grandes ejércitos bajo el dominio del dragón.

Mas así como existen esas miríadas de espíritus que han creado el mal, también existen incontables legiones de espíritus del bien; son los ángeles del Señor que han llegado en este tiempo prometido, y que a su lado luchan incansablemente para acabar con la tiniebla que ha dominado a sus hermanos. En este tiempo en que la maldad está llegando a su punto máximo, la presencia de esos seres de luz, está siendo más clara y palpable para todos los hombres.

1884-1950. El cumplimiento del tiempo final.

En ese período comprendido entre los años 1884 y 1950, al igual que la Ternura Divina se hizo presente dejando un mensaje de amor para sus hijos, el mundo espiritual de luz, vino a comunicarse con sus hermanos como estaba prometido, dejando a través de la comunicación por el entendimiento humano de todos aquellos que preparados esperban el cumplimiento de las profecías, un mensaje lleno de hermandad y enseñanza, para ayudar a esta Humanidad en su lucha contra el mal (Mateo 16:27; 25:31; Lucas 21:27; Apocalipsis 4:1; 6:13).


"En nombre del Divino Maestro,
el mundo espiritual de luz saluda
a sus hermanos.
....Venimos en ayuda de los labriegos
de la Obra del Señor 	en este tiempo,
y venimos en delicada misión entre
vosotros...."
   Los Protectores. Explicación 1:1,3.
....la serpiente antigua
que se llama diablo y Satanás....
"....¿No sabéis que la amistad del mundo
es enemistad contra Dios?
Cualquiera, pues, que quiera ser amigo
del mundo, es enemigo de Dios".
Santiago 4:4


La palabra «Satanás» viene del hebreo Chaitán, lo que quiere decir: Genio enemigo de Dios. ¿Y quién es el enemigo de Dios? Dijo el Divino Maestro: «El que no es conmigo, contra Mí es» (Mateo 12:30), lo que dicho en otras palabras significa: Aquél que no cumpla con la Ley Divina es enemigo de Dios.

Cada vez que el hombre actúa en contra de su naturaleza divina, y hace cosas que están fuera de la Ley dictada por Dios, se convierte en Satanás; ése es el enemigo, esa es la tiniebla que no ha sido creada por nadie más que por el hombre mismo.

Sin embargo, las interpretaciones erróneas han dado vida e incluso forma a un personaje al que se culpa por las caídas de los hombres, y se han creado alrededor de esa fuerza del mal, ciencias, cultos, supersticiones y mitos que han llegado hasta nuestros días.

Ay de los moradores de la tierra
y del mar, porque el diablo….


Esas miríadas de espíritus rebeldes que se han dejado
seducir por el mal, lo han fortalecido a tal grado, que han
perdido el control de sí mismos y han creado el caos en
todos los órdenes de su existencia. Esta Tierra que en
un principio fue madre pródiga, poco a poco se ha ido
convirtiendo en el verdugo de los actos equivocados de
los hombres.


Y cuando vio el dragón que había
sido arrojado a la tierra, persiguió a la
mujer que había dado a luz al hijo
varón.
Y se le dieron a la mujer las dos
alas de la gran águila, para que volase
de delante de la serpiente al desierto,
a su lugar, donde es sustentada por
un tiempo, y tiempos, y la mitad de
un tiempo.
Y la serpiente arrojó de su boca,
tras la mujer, agua como un río, para
que fuese arrastrada por el río.
Pero la tierra ayudó a la mujer,
pues la tierra abrió su boca y tragó el
río que el dragón había echado de su
boca.
Entonces el dragón se llenó de ira
contra la mujer; y se fue a hacer guerra
contra el resto de la descendencia de
ella, los que guardan los mandamientos
de Dios y tienen el testimonio
de Jesucristo.
    Apocalipsis 12:13-17

Y se le dieron a la mujer las
dos alas de la gran águila....
"....los que esperan a Jehová
tendrán nuevas fuerzas; levantarán
alas como las águilas; correrán, y no
se cansarán; caminarán, y no se fatigarán".
   Isaías 40:31


Las águilas del Señor se están preparando. Son espíritu encarnados y desencarnados que forman esa porción destinada a cumplir una misión entre la Humanidad de este tiempo. Son los hijos de la promesa, los 144 000 escogidos, el pueblo mariano que en silencio se prepara para la batalla. Mas sus armas no son fratricidas como las de los hombres, sus armas son espirituales y elevadas, ése es el símbolo del águila. Sus armas son el amor, el ejemplo, la fe, la salud, la palabra, la sabiduría; serán soldados de la paz, de la justicia, serán consoladores y profetas.


"....dondequiera que estuviere
el cuerpo muerto, allí se juntarán las
águilas".
Mateo 24:28

....un tiempo, tiempos y la mitad de un tiempo



La palabra del Señor se cumple inexorablemente. El reinado del mal está llegando a su fin. El Sexto Sello se ha desatado, y con él, desde 1866, el Tercer Tiempo que vieron los profetas ha llegado a la Humanidad. El tiempo de la espera ha terminado, y las huestes del Señor se reúnen para cumplir su tarea de restauración.


"....Y hablará palabras contra el Altísimo,
y a los santos del Altísimo
quebrantará, y pensará en cambiar
los tiempos y la ley; y serán entregados
en su mano hasta tiempo, y tiempos,
y medio tiempo."
   Daniel 7:25

....y la serpiente arrojó de su boca
tras la mujer, agua como un río....


Muchos se han levantado en este tiempo desconociendo la pureza y perfección de María, sin darse cuenta en su ignorancia que desafían a Dios negando su poder.

Los hombres han forjado teorías y se han dejado arrastrar por ríos de confusión, y con ella se han creído dignos de juzgar una de las muestras de amor más grandes que Dios ha entregado a esta Humanidad, sin comprender que María no fue sólo la mujer que dio a luz al Mesías, sino que es la Ternura de Dios que vino a manifestarse a los hombres como Madre. Y se han atrevido a juzgar su virginidad y se han escandalizado negando su Naturaleza divina, tomando como armas las propias palabras que el Divino Maestro dijo cuando llamó hermanos a sus discípulos, ¿y quién más digno de llamar hermanos a los hombres, sino el Hijo de Dios?

Mientras unos niegan la escencia maternal que existe en Dios, otros tratan de comprender con su mente limitada la virginidad divina, y otros más, que dicen entenderla, se han concretado a formar alrededor de Ella ritos y festines, idolatrías y fanatismos que en muchas ocasiones se han convertido en una forma de lucro, olvidándose de la verdadera escencia que encierra el ejemplo de amor humilde y silencioso que la Ternura Divina vino a dar a los hombres


"Humanidad: Os amo infinitamente.
Nada reprocho a quienes no me reconozcan como Madre,
porque no solo amo a los que me aman o creen en Mí.
Todos sois míos, y todos llegaréis a la presencia
del Padre, donde me veréis con mis brazos amorosos
esperándoos, para haceros sentir el calor de mi regazo,
del que nunca volveréis a alejaros."
   El Mensaje de María. Capítulo 1:29

....y fue a hacer guerra contra
el resto de la descendencia de ella....



La lucha ha comenzado, y será en todos los órdenes. Todo aquello que haya salido de su cauce tendrá que regresar a él. El mal se ha extendido por todas partes, el planeta se ha convertido en un campo de batalla en el que las fuerzas del mal luchan contra las fuerzas del bien. La batalla se libra no sólo en los campos de las naciones que están en guerra, sino en todas las instituciones humanas y en el ámbito espiritual, a través del corazón y la mente, donde el mal penetra sin que los ojos humanos lo puedan contemplar.

María, la Madre Universal, está tendiendo su velo de ternura por todos los confines de la tierra, y está despertando con su amor a su pueblo Mariano, mientras que al mismo tiempo la fuerza del mal se interpone en el camino de aquellos que buscan el bien, para hacerlos caer en las redes de sus propias pasiones. Mas como está escrito: El mal no prevalecerá.